El inicio de Lalaya.


 Una historia antes de la historia.

Lalaya es mi última novela, tiene unas setenta y cinco hojas tamaño A4 y me llevó dos meses escribirlo, lo que ha sido un record para mí, esto se dio así, porque fluyó inmediatamente, y sus personajes me condujeron de maravillas.

Inspiración.

Cada historia que escribí y que escribo, tienen un disparador.
Por ejemplo, comencé con El Pasajero, (cuento emparentado con Lalaya), durante el 2017, cuando una sucesión de huracanes destructivos golpeó al Caribe y a Miami. En aquel momento pensé: "El planeta se está revelando contra nosotros".
Y entonces surgió la idea del personaje que sobrevivió a la catastrófica destrucción de un continente, y toda su civilización. Algo así como la mítica "Atlántida", pero muchísimo más antigua y tal vez , más real.
Soy de la idea de que no podemos saber qué sucedió en el planeta en su vasta historia, nos valemos de los rastros que nos dejaron quienes nos precedieron. ¿Pero, y si existieron otras civilizaciones que no dejaron evidencias? O sí dejaron, y todavía no las hallamos.
En definitiva, el personaje de El Pasajero, es la única prueba de su mundo perdido y por un don que él no entiende y que tampoco sabe quién se lo dio y porqué, llegó vivo hasta nuestros días. Tal vez él no lo sepa, pero yo le dí una misión, y es la de contarnos, la de advertirnos ...
La historia de Lalaya, se presentó de una forma un poco más poética, y fue cuando desde la ventanilla de un transporte público, vi como el viento arremolinaba hojas secas en una vereda, esa imagen fue tan potente, que me sirvió para iniciar la narración.
Luego decidí emparentarla con El Pasajero, transcurriría en un pueblo que él visitó y ayudó, hace miles y miles de años, antes inclusive, del supuesto diluvio del que hablan las tablillas sumerias, el antiguo testamento de las religiones judeocristianas, y un nutrido número de culturas en todo el mundo.
Lalaya es la niña que comienza jugando con las hojas, que la brisa parece arremolinar solamente para ella, y es hija del protagonista de El Pasajero.
El cuento se puede situar en una prehistoria, anterior a la conocida. Hablo de unos pueblos ficticios, pero que tal vez existieron, aunque no nos dejaron indicios o no los hemos encontrado todavía, lo que me permite como escritora, jugar en la creación de ese mundo, también me tomo algunas licencias, porque además no soy historiadora, sin embargo me baso en investigaciones, y en pueblos antiguos que realmente existieron.
Para que una historia sea real, tengo que investigar, y así armarla con la mayor cantidad de datos posible, aunque después no aparezcan en la narración, pero le darán un cimiento y un apoyo importante. Es como cuando era actriz y trabajaba en un personaje, a veces tenía que inventarme, imaginar un antes de esa persona, que justifique determinado accionar, aunque ese pasado fuese solamente de mi conocimiento.
Por lo demás, los personajes de este cuento, son seres humanos reales, que viven y tienen sentimientos como los que tenemos hoy en día, aunque ellos recién están creando una sociedad, que comienza a ser tan compleja como la nuestra.
En algunas páginas presenté a los personajes principales, en la actualidad, me encuentro corrigiendo, y ultimando detalles, por ejemplo, cómo llega esta historia al lector: A través de tablillas, que un descendiente de Lalaya, mandó a escribir, mil años después de que ella viviera.
Pensaba cambiar la voz, que sea la de Lalaya, es decir primera persona. Pero, con el recurso de las tablillas, será la voz del escriba, quien nos cuente la historia, adornada seguramente, por "quienes" la trabajen, después de haber sido descifrada, para que el lenguaje sea moderno.
Un detalle, que por ahí no esté en el libro, pero que es bueno saberlo, o no, sólo para los más curiosos:
Hubiese sido imposible, traducir, las tablillas, pues el lenguaje y los signos, que lo representan, son anteriores a todo lo conocido, cuando se supone que todavía no existía la escritura. Pero, cayeron en manos de alguien. Un anciano erudito, que vive en Buenos Aires, él dice que logró traducir los caracteres y el habla, gracias a su amplio conocimiento de lenguas antiguas, anteriores a la sumeria, protosumeria, y protoindoeuropeas, entre otras.
¿Está emparentada la lengua de las tablillas con esas antiguas lenguas?
¿O fue capaz de traducirlas, porque en realidad, él estuvo en el momento en que ese idioma se hablaba sobre la tierra?

Si desean conocer más, dejo el enlce del libro: El Pasajero, en Amazon.
También está disponible en PDF, para residentes en Argentina.
https://www.amazon.com/dp/B07GBMVCWJ

Booktrailer. Lalaya.
https://youtu.be/QEh1zQNzgDM








Comentarios

  1. Me agrada la forma en la que narras las cosas, y como surgió la idea en tu mente para dar comienzo a la historia.

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Soy Silvina Sant escritora.

Mis libros publicados.

El narrador. Breves consejos, para escritores principiantes.